¿Dónde colocarla?
Generalmente, las alfombras se colocan al pie de la cama para cubrir el espacio que queda, sin embargo otra opción es colocarlas a cada lado de la cama. Para esta opción suelen utilizarse un modelo idéntico a cada lado de las mismas dimensiones. En este caso el tamaño de la alfombra lo marca el propio espacio del que disponemos entre la cama y la pared. Eso sí, nunca debe ser más larga que la cama y no suele coger el trozo de la mesita de noche. Son perfectas para no sentir el frío al salir de la cama por las mañanas.
Las medidas
Las medidas que debemos elegir para decorar nuestro espacio dependerán del tamaño y distribución de nuestro dormitorio. Siempre deben quedar al menos 30 cm libres, aunque cubriendo la mayor parte del suelo podemos conseguir un efecto moqueta que cubra al completo nuestra superficie y así aislarlo. Sin embargo, si necesitamos cubrir un espacio concreto, podemos buscar una alfombra a medida que se ajuste a nuestras necesidades.
Superposición de alfombras
Esta es una tendencia que se ha visto en los últimos meses. Consiste en colocar una alfombra sobre otra utilizando una como base de mayor tamaño y colocando la más pequeña encima. Con esto conseguimos aislar más el suelo y el grosor de la composición es mucho mayor. Eso sí, si vas a colocar muebles encima debes tenerlo en cuenta para evitar tropiezos.
Alfombras vinílicas
Seguro que las has visto sobre todo en zonas como la cocina o de exterior, pero sin duda también son una buena opción para tu dormitorio. Al ser sintéticas y no tener fibras no acumulan polvo ni suciedad, por lo que son de fácil limpieza. Podrás encontrar infinidad de diseños que imitan todo tipo de acabados naturales.
¿Qué te han parecido estos consejos para decorar tu dormitorio con alfombras? Si necesitas que te asesoremos o aconsejemos qué es lo mejor para tu hogar, no dudes en ponerte en contacto con nosotros o ven a visitarnos.